28 mar 2012.
Barreras de accesibilidad en la atención en salud sexual y reproductiva.
En la Intendencia de Montevideo se realizó el seminario “Mujeres con discapacidad: desafío para la formación de recursos humanos en salud sexual y reproductiva”, el 27 de marzo. Durante la jornada se analizó la situación de las mujeres con discapacidad uruguayas con el objetivo de generar un espacio de reflexión sobre la problemática con los responsables de la formación de recursos humanos en la salud.

El evento fue organizado por la Secretaría de Gestión Social para la Discapacidad, la Secretaría de la Mujer y la División Salud de la Intendencia de Montevideo, el Área de Salud Sexual y Reproductiva del MSP, el Programa Nacional de la Discapacidad (PRONADIS-MIDES) y Naciones Unidas en Uruguay, a través de sus agencias ONU Mujeres, OPS y UNFPA.

La convocatoria estuvo dirigida a referentes de Facultad de Enfermería, las Cátedras de Gineco-obstetricia y de Medicina Familiar y Comunitaria y Escuela de Parteras de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República.

Como disparador de la discusión, se presentaron los resultados del estudio sobre derechos en salud sexual y reproductiva de las mujeres con discapacidad y accesibilidad de los servicios de salud en Montevideo, que se llevó adelante en 2011. El informe pone de manifiesto una situación en la cual las barreras en el acceso a los servicios de salud generan una exclusión y una discriminación grave de las mujeres con discapacidad, perpetuando una realidad que vulnera sus derechos humanos.

Como señaló la coordinadora del estudio, Natalía Mattioli, muchas de esas barreras están en el campo de lo actitudinal y se vinculan a las representaciones y concepciones que profesionales y trabajadores de la salud tienen sobre la discapacidad y la salud sexual y reproductiva de las mujeres. Las prácticas de los equipos de salud y la calidad de la atención que reciben las mujeres con discapacidad se ven fuertemente influenciadas por estas concepciones.

María José Bagnato, directora del Pronadis, insistió en que la formación de recursos humanos de salud es central para garantizar los derechos de las mujeres con discapacidad, y de ahí la importancia de colaborar con las autoridades de la salud. Para ello, y como continuación de este proyecto, se anunció que se diseñarán guías sobre discapacidad para profesionales de salud para ser aplicadas a nivel nacional.

Por su parte, el director de Salud de la Intendencia, Pablo Anzalone, se congratuló porque esta iniciativa había surgido de las propias protagonistas, quiénes participaron en el estudio a través de entrevistas en profundidad y grupos focales. “Este trabajo es un incentivo y un estímulo a repensar nuestras prácticas profesionales, generar procesos de aprendizaje e interactuar con usuarios y usuarias”, afirmó.

En la misma línea, Elena Ponte, de la Secretaría de la Mujer, recordó que desde que se lanzó el segundo plan de oportunidades y derechos entre mujeres y varones se ha estado buscando incorporar la discapacidad. Esta investigación muestra barreras, para a partir de este diagnóstico poder generar políticas, indicó.

En la discusión por parte de representantes de las cátedras universitarias hubo consenso en que se trata de un tema nuevo y en el que queda mucho por avanzar. Por ejemplo, Rafael Aguirre, del Programa de Salud y Mujer del MSP, insistió en la necesidad de formar un grupo de trabajo para redactar guías específicas para profesionales de salud de todo el país. La Dra. Gracia Rey agradeció poner el tema en la mesa política y propuso incluir el tema en el nuevo plan de estudios. Representantes de la Escuela de Parteras y de Enfermería anunciaron su interés por participación en la elaboración de la guía y remarcaron la importancia de abordar el tema.

De este modo se están dando los primeros pasos de una manera articulada institucionalmente para avanzar en los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres con discapacidad. Se están elaborando materiales informativos y durante marzo se impartieron tres jornadas de capacitación a profesionales de la salud en diferentes centros de atención de Montevideo.