Usted está aquí

La inclusión de la Educación Sexual Integral/Educación Integral en Sexualidad (ESI/EIS) es fundamental para promover el cuidado del cuerpo y la salud, valorar la afectividad, respetar la diversidad, ejercer los derechos y ofrecer mejores escenarios de equidad de género. Desde hace varias décadas, América Latina y el Caribe incorporó su abordaje confluyendo en esta agenda las políticas promovidas por los Estados, las luchas del movimiento de mujeres, feminismos y colectivos LGBTI+ y el impulso brindado por organismos internacionales.

En el 2008 el compromiso de la región quedó plasmada en la declaración “Prevenir con Educación” en el marco de la XVII Conferencia Internacional de SIDA en la Ciudad de México en la que se acordó implementar o fortalecer estrategias intersectoriales de educación integral en sexualidad. En 2015, la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030 renueva estos esfuerzos reconociendo la importancia de la educación sexual integral para alcanzar una educación que motorice el desarrollo y el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Muchos países de la región cuentan con normativas específicas que establecen la obligatoriedad de la implementación de la ESI/EIS o bien, desarrollaron políticas públicas a favor de ello. No obstante, estos marcos muestran aún falencias. Los avances en su implementación son auspiciosos al tiempo que desiguales y en ocasiones se observaron retrocesos. La cuestión de la calidad de los contenidos y la puesta en marcha de planes de estudios agrega complejidad a este proceso.

Con el objeto de fortalecer la implementación de la ESI/EIS atendiendo este panorama, este estudio recopiló, sistematizó y analizó los resultados de investigaciones en esta área. Para ello se conformó un corpus de 42 publicaciones científicas que abordan la efectividad de la ESI/EIS en América Latina y el Caribe (LAC) en los últimos 10 años (2011-2021). Estas investigaciones recuperan metodologías cuantitativas y cualitativas con diversos alcances: locales, nacionales y regionales. El análisis se sustentó en la búsqueda de convergencias que permitieran reconocer factores que obstaculizan o facilitan y fundamentar recomendaciones con evidencia empírica. Los resultados de este trabajo se organizan en dos direcciones: por un lado, en la identificación de seis recomendaciones fundamentadas y por el otro, en la descripción de un conjunto de prácticas pedagógicas innovadoras.